"Papá mató a mamá, le hizo pum, pum y cayó"

Desireé Prieto, de 22 años, fue al piso de su ex-pareja para recoger al hijo de ambos. Acababan de separarse y él no aceptaba la situación. Esa tarde, degolló a la mujer e hirió de muerte a su hijo. El agresor, que está a la espera de juicio, fue detenido horas después.
Todo ocurrió en Gijón, el 14 de julio de 2006. Desde ese día la vida ha cambiado por completo para María Dolores, la madre de Desireé. Ahora ejerce de madre, cada mañana lleva a su nieto al colegio, le ayuda con los deberes... Dice que Cristian se ha recuperado físicamente, pero echa mucho de menos a su madre y lo recuerda todo con claridad. "Te dice: papá mató a mamá, le hizo pum, pum y cayó... El psicólogo dice que es mejor que no olvide".
Lucha por acabar con los malos tratos
Además de cuidar a su nieto, lleva las riendas del caso judicial contra su ex-yerno, que aún está a la espera de juicio, y lucha para acabar con el problema de los malos tratos. Acude a concentraciones, charlas y debates. El pasado año recibió un premio del Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género por su labor. Está convencida de que la única solución es el cumplimiento íntegro de las penas por los maltratadores.
"Eso de ir un mes a la cárcel y luego a la calle, no. Las condenas, íntegras, y condenas, porque a nosotros nos han condenado a vivir sin nuestros hijos... Y yo creo que poniendo mano dura esto se para", asegura María Dolores. Su voz suena fuerte, rotunda. Es el convencimiento de quien lo ha perdido todo.
Un tema "poco" tratado
Según el sondeo de Demométrica para Informativos Telecinco, el 51% de los encuestados considera que la violencia de género es un tema "poco" tratado como problema de Estado en los últimos años.

Vía: Telecinco.com